Los servicios básicos de Rajoy

Dicen que empezamos a ver una luz al final del túnel, pero todavía no sabemos si es el tren que viene de frente. Es posible que estemos saliendo de la crisis, como se esfuerza en decir el gobierno, pero es fácil ya evaluar el coste de tanta tragedia.

No es desde luego, como dice Rajoy, "preservando los grandes servicios públicos", frase propagandística que debería ser enmarcada con similares méritos a aquella de los brotes verdes. El lenguaje al servicio del gobierno, qué buenos empleados publicitarios tienen las más altas instituciones. Nunca se mintió tanto desde tan arriba. Ni tan frecuentemente ni con tanto convencimiento. Qué servicio presta la prensa a quien manda, la de un lado y la del otro, la de unos y la de los otros. ¿No será esa una de las causas de tanto cierre de periódicos y televisiones? La verdad suele resplandecer tarde o temprano y termina por marcar el descrédito de quien nos engañó.

¿Puede alguien seguir comprando los periódicos que nos vendieron la plenitud de aciertos de Zapatero cuando hasta Solbes nos dice, a buenas horas, que se fue del gobierno cuando se cansó de hablar sin ser atendido contra las medidas de su presidente del gobierno? ¿Y cómo creer a quienes nos venden las excelencias de Rajoy y su defensa de los servicios públicos? Al tiempo, que nos dará la razón.

Nunca en España se habían suprimido tantos servicios públicos, camas de hospital, médicos de urgencia, maestros; nunca los funcionarios habían sufrido tantos recortes como ahora... ¿Qué servicios públicos mantiene Rajoy? ¿Dónde está la defensa de los pensionistas, dónde las ayudas a la dependencia? Pero ¿por quién nos toman? No se ha reformado la estructura de un Estado con administraciones superpuestas, no se ha suprimido, más allá de algunas empresas públicas, despachos, coches oficiales o moquetas, no se ha reducido el número de asesores. ¿Dónde está la defensa de los servicios básicos cuando la enseñanza primaria se está viendo afectada, cuando hay niños que tienen que comer de la caridad?

Puede alegarse, creo que con razón, que buena parte de esto empezó ya con Felipe González y Zapatero, que soportaron huelgas generales, y que el PP no hace más que seguir su senda... ¿Y? Puede decirse que todos los recortes actuales son consecuencia de la ignorancia económica de Zapatero, ésa que iba a superar en un par de semanas con la ayuda de Jordi Sevilla. ¿Y? Nadie dijo que todo esto se solucionaba por arte de magia, antes al contrario, Rajoy en su programa nos vendió una Arcadia en la que nunca iba a suceder nada de cuanto está pasando. Nada de emprender medidas rompedoras, definitivas, nada de reformar un Estado insostenible, sino seguir la transitada senda de la reducción de salarios, del aumento del tiempo de trabajo, de la eufemística reforma de las pensiones, qué ironías tiene la vida, y del endurecimiento de las condiciones de vida. ¡Y dice que preserva los servicios básicos! Dentro de poco nos hablará de los brotes verdes